El hombre como ser moral

Se entiende por valor moral todo aquello que lleve al hombre a defender y crecer en su dignidad de persona. El valor moral conduce al bien moral, lo que tiene que ver con un conjunto de reglas referidas a la conducta o comportamiento de los hombres, que prescriben y codifican dicho comportamiento. El término moral se refiere al comportamiento en qué consiste nuestra vida, este comportamiento se compone de hábitos, actos y costumbres. El hombre tiene la libertad para elegir las de las posibilidades que se le ofrecen en cada situación, de las que quiere realizar y apropiarse.

      El valor moral perfecciona al hombre en cuanto a ser hombre, en su voluntad, en su libertad, en su razón. Se puede tener buena o mala salud, más o menos cultura, pero esto no afecta directamente al ser hombre. Sin embargo vivir en la mentira, el hacer uso de la violencia o el cometer un fraude, degradan a la persona, empeoran al ser humano, lo deshumanizan. Por el contrario las acciones buenas, vivir la verdad, actuar con honestidad, el buscar la justicia, le perfeccionan.

El valor moral te lleva a construirte como hombre, a hacerte más humano. Depende exclusivamente de la elección libre, el sujeto decide alcanzar dichos valores y esto sólo será posible basándose en esfuerzo y perseverancia. El hombre actúa como sujeto activo y no pasivo ante los valores morales, ya que se obtienen basándose en mérito. Para lograr comprender plenamente los valores morales debemos analizar la relación que éstos guardan con otro tipo de valores. Siendo el ser humano el punto de referencia para los valores, cabe ordenarlos de acuerdo con su capacidad para perfeccionar al hombre. Un valor cobrará mayor importancia en cuanto logre perfeccionar al hombre en un aspecto más íntimamente humano.

El hombre es constitututivamente libre y tiene que hacerse a sí mismo, darse una personalidad y es por eso que el hombre es constitutivamente moral. No puede ser "no moral", ni "amoral". A esta dimensión de la moral la llamamos "moral como estructura".

Sociologismo y Relativismo Moral


El Sociologismo Moral Es La Corriente De Pensamiento Que Identifica La Conducta Moral Con La  Conducta Social.

Es un hecho innegable que las convenciones sociales, las pautas culturales, los gustos de una sociedad determinan que las personas adopten unos  u otros patrones de conducta. La sociedad aprueba unas conductas como buenas y reprueba otras como malas.

En la actualidad, frente al convencionalismo cultural, la humanidad va camino de reconocer unos valores sustantivos, expresados en la Declaración de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas (1948) suscritas por más de 130 países. Esta declaración expresa la conciencia media moral, la moral mínima que debe sobreimponerse a toda sociedad y a toda cultura.

La Conducta Moral


La conducta moral es toda conducta humana libre que tenga referencia a la conciencia, que se enfrenta de algún modo a un deber ser y que pueda ser juzgada como universalizable o no.

Es el conjunto de acciones de las que tenemos que responder, justificándolas responsablemente. Ser moral o tener una conducta moral significa no solo evitar el mal, sino también hacer el bien, para ello en ocasiones es necesario tener el valor de enfrentamos al código moral de nuestro entorno cultural...el ser humano decide lo que tiene que hacer en cada situación.

La acción de ser libre y responsable significa que desde nuestra inteligencia respondemos a los estímulos con conductas que elegimos según nuestros criterios y escala de valores responsabilidad trata de construirnos nuestra vida y ser libres los seres humanos por ser libres somos responsables seriamos irresponsables si no fuéramos capaces de vencer el egoísmo la pereza, etc.

Elementos de la Conducta Moral

Conciencia
¿Qué es la conciencia? La conciencia es un juicio de la razón por el que el hombre reconoce la bondad o maldad de un acto. Por ejemplo dice: "soy consciente de que este detalle con mis padres es bueno".
¿Qué se necesita para tener conciencia? Para emitir un juicio de conciencia sobre el bien-mal de un acto, se necesita una inteligencia que juzgue, y un conocimiento previo que sea la base en que se apoya este juicio moral. Algo similar sucede cuando el entendimiento dictamina sobre la verdad de algo. Por ejemplo, al escuchar: "las vacas vuelan", la razón emite un juicio inmediato que dice: "falso". Este juicio está basado en el conocimiento previo de vacas y vuelo.

Voluntad
La voluntad es la capacidad consciente que posee el ser humano para realizar algo con intención. Y realizarlo a pesar de las adversidades que vienen con la vida, de las dificultades presentes a diario, de los contratiempos muy personales y los oscilantes estados de ánimo.

Responsabilidad
¿Qué es la responsabilidad? Una persona responsable toma decisiones conscientemente y acepta las consecuencias de sus actos, dispuesto a rendir cuenta de ellos. La responsabilidad es la virtud o disposición habitual de asumir las consecuencias de las propias decisiones, respondiendo de ellas ante alguien. Responsabilidad es la capacidad de dar respuesta de los propios actos.
Condiciones para que exista responsabilidad.- Para que pueda darse alguna responsabilidad son necesarios dos requisitos:
libertad.- Para que exista responsabilidad, las acciones han de ser realizadas libremente. En este sentido, ni los animales, ni los locos, ni los niños pequeños son responsables de sus actos pues carecen de uso de razón (y el uso de razón es imprescindible para la libertad).
ley.- Debe existir una norma desde la que se puedan juzgar los hechos realizados. La responsabilidad implica rendir cuenta de los propios actos ante alguien que ha regulado un comportamiento.

Como Mejorar la Responsabilidad
¿Cómo ser más responsables? El camino más rápido para mejorar en responsabilidad es apreciar claramente que de nuestro comportamiento dependen cosas grandes. Los hombres con ideales y metas elevadas se responsabilizan enseguida de sus decisiones.
¿Qué cualidades ayudan a la responsabilidad? Hay varias virtudes que se relacionan mutuamente con la responsabilidad. Digamos tres:
Valentía.- Para dar cuenta de los propios actos hace falta un valor capaz de superar el temor al castigo. (Responsabilidad ante los demás).
Humildad.- El orgullo dificulta pedir perdón; mientras que la persona humilde reconoce sus fallos. (Responsabilidad ante uno mismo).
Piedad basada en la filiación divina.- Quien aprecia el gran don de ser hijo de Dios procura que su comportamiento agrade a su Padre. (Responsabilidad ante Dios).

Juicio Moral y Acciones Autónomas y Heterónomas

La conciencia moral, corno juez de nuestros actos, sólo puede darse cuando éstos son actos humanos voluntarios, o sea los actos en los que ha intervenido la libertad de acción. No puede haber un juicio de conciencia cuando los actos efectuados han sido obligados por una autoridad o por una acción coercitiva de agentes extraños a nosotros mismos. Se podría poner con ejemplo la acción de un soldado en tiempo de guerra En la actividad profesional a veces se toman decisiones por obligación o por seguir esquemas o sistemas preestablecidos, que muy poca libertad de acción dejan al sujeto, en estos casos la conciencia moral quedara un tanto suprimida.

Una ética heterónoma es aquella que acepta un sistema moral que se impone culturalmente. Es decir, uno es moralmente heterónomo si se ve obligado a aceptar un sistema moral (o simplemente acepta un sistema moral) sólo porque lo creen los propios padres o maestros, o porque es lo que se cree en la comunidad en la que se está inmerso. La moral heterónoma es una aceptación irreflexiva de los principios y normas imperantes en la sociedad.

Una ética autónoma es aquella que induce a las personas a pensar por sí mismas. En la esfera moral, la autonomía implica una voluntad libre que muestra mediante la razón, que ciertos principios morales son correctos.

Podemos decir, para aclarar, que si uno actúa de acuerdo a una moral heterónoma, cumple con los principios morales sólo por temor al castigo, mientras que si actúa autónomamente, sigue los principios porque los considera su deber. Es decir, la autonomía se rige por el cumplimiento del deber por el deber mismo.